por De tantos emoticones que suma y resta whatsapp se nos es fácil deducir de donde salen la mayoría, algunos son japoneses, otros salen de las cómicas y otra buena parte ya pertenecían a los signos y dibujos que ya conocemos, pero hay un par que se inspiraron en el arte de muchos años atrás, como estos…
El emoticoncito asustao ¿Se inspiró en Scary Movie?
Para el que anda fuera del arte piensa con tranquilidad que el emoticón del muñequito asustado fue inspirado en la máscara del asesino de Scary Movie, pero para el que entiende su origen sabe que viene del cuadro «El Grito» del artista noruego Edvard Munch de 1893. Así que sí usas ese emoticón para asombrarte, úsalo mejor para tus ataques de pánico existencial como lo hizo el artista.
La ola de surfear.
Es la más usada por la gente playera y los surfistas. El emoticon es una translación fiel de una estampa o ukiyo-e, o grabado japonés del artista del siglo XIX (18) Katsushika Hokusai llamada La Gran Ola. Esta técnica artística consiste en imprimir en bloques de madera la escena que se quiere representar. La obra es de 1830.
El emoticoncito que piensa se inspiró en una escultura
El emoticon que se intriga es el homólogo de una escultura que Auguste Rodin empezó a imaginarse y trazar en 1880, hasta que la elaboró en Bronce en 1906. Las escultruras llevan la fecha de cuando las imaginaron, no cuando las terminaron. Se llama «Le Penseur» (el Pensador) y por ser la escultura más famosa de la historia del arte se estima que vale 25 millones de billetes.
Los astros con rostro
Si bien desde siempre las culturas del mundo han humanizado poniéndole rostros a los fenómenos naturales y los cuerpos celestes fue al final de la edad media cuando al joven Alberto Durero (Albrecht Dürer) se le encomendó como estudiante ilustrar el libro de Las Crónicas de Nuremberg quien era una especie de Marco Polo Alemán de esa época. En el recuadro de arriba se ilustra la revelación de El sexto sello del apocalípsis, lo que nos dice que la humanización en bien del mal proviene y se relaciona con la personificación de la serpiente del Paraíso Bíblico.
El Emoji del Popó
La manera más eficaz de llegar a la cúspide de la humanidad, la representación pictórica en espiral de la torre de Babel fue el producto del ingenio de los artistas del renacimiento que la representaban como una funcional torre en espiral basada en la sucesión o secuencia de Fibonacci que matemáticamente representa una continuidad infinita; imaginamos que para llegar más fácilmente hasta el cielo donde está Dios. ¿Y el Emoji del Pupucito? Nada, ganas de joder, igual que esa soplada de la sucesión de Fibonacci que me inventé…pero tiene sentido la vaina.
…mejor me voy volando de aquí antes de que me inmolen en la hogera!
