En marzo de 2010 se dejó de producir el último reproductor Walkman de SONY, y justo en 2019, en su 40 aniversario, SONY no intentó fabricar un remake del modelo, tomando en cuenta que existe un nuevo renacimiento por la nostalgia del cassette en estos tres últimos años, la gente jóven está comprando walkmans viejos y reproduciendo cassettes en ellos, tapes de antaño y nuevos que se venden por EBAY y que aún funcionan, a pesar de tener entre 30 y 40 años de existencia.
Hoy día aún se fabrican cassettes en alguna parte de China y los Estados Unidos, donde el mercado de los reproductores de cassettes es actualmente muy pequeño siendo los hipsters de la década pasada quienes quisieron identificarse y algunos nostálgicos también. Hay gente aún conserva sus viejos «tapes» con sus propias grabaciones y desean comprarse hoy un reproductor en buen estado. Para ellos llegaron unas nuevas caseteras portátiles a bajo precio que reproducen y convierten a MP3 lo que una vez estuvo en cinta magnetofónica.
15 dólares en EBAY, puedes convertir a MP3 y enviar en línea lo que por años estuvo en un cassette físico.
Desde el 72 al 76 se fabricaron los primeros Maxell C90
La LN en el nombre de la carátula significaba Low Noise, o sea bajo ruído, ese ruído era el metal impuro que iba adherido a la cinta magnética.
Pero se nos olvidaba el origen de los cassettes en el mundo, ellos los creó Phillips en 1962, a pesar de que los más birriados por los panameños fueron los Maxell y Sony, ellas eran las marcas de mayor distribución en esos años. La gente acostumbraba grabar los programas de las emisoras con sus radios portátiles a pilas y los equipos de casa años antes de que el Walkman se haya inventado y aparecido en 1979.
Esta cinta de Maxell siguió fabricándose apareciendo su relevo en 1982 la cual fue la versión más birreada en Panamá, antes de que se proliferaron todas las marcas de Walkman (audio-portables) de Sanyo, Hitachi, Aiwa, Pioneer, JVC. La gente ahora quería grabar con ellos la música de las emisoras de FM, porque ellas emitían al aire el sonido en estéreo de alta fidelidad y eso era nuevo para la gente, escuchar sonido grabado como los de la realidad. Más adelante hubo una versión de cassettes de Maxell llamada S-LN que se fabricó en 1990 y 1991, y que duraba 120 minutos, o sea una hora en cada lado, y la cinta era tan delgada y el rollo tan pesado, que se rompía y los walkmans las enredaban, por eso duraron sólo dos años en venta.
Como vemos, Japón era el mayor fabricante de cassettes del planeta, mientras que China en esos años estaba sumida en una pobreza tipo medieval. Y pensar que China es hoy la mayor fabricante de electrónica del mundo.
Los tapes cromados y los Decks
Los favoritos de las discotecas móviles en materia de cassettes cromados
Ya desde los inicios de los 80’s Maxell era el único fabricante que dominaba el país junto a SONY con sus cintas de cromo, se les llamaba así porque los cassettes tenían 4 tipos de calidad, la primera era Posición normal, I (o sea todos los cassettes), la segunda II tenía menos impurezas en la ferrita, el tipo III tenía dióxido de cromo y el IV era más caro porque al estar hechas con metal reproducían el mejor sonido posible, costando hasta 7 dólares un tape. Esas cintas no se podían usar con cualquier equipo o Walkman barato, porque esas cabezas destruían y marcaban horriblemente la cinta de estos cassettes finos, sino que se aconsejaba comprar equipos caseros de alta fidelidad.
Los orígenes de la piratería musical empezaron en estos aparatos, te copiabas una cinta de un artista y la pasabas a otro montón de cintas.
Con estas cintas, las de cromo, las discotecas móviles (Revelación Vielkito, Sony Tape, Truenos y Relámpagos y pequeñas discotecas móviles) se hacían de dinero vendiendo mezclas de la música en cassettes con sus propias discotecas; dancehall, reggaeton, salsa y un reducido grupito de bochoms en los 90’s que escuchaban Rap y Hip-hop. Pero si no querías pagarte una cinta de estas, las tuyas estaban rellenas de ponches de FABULOSA!, los fabulositos, la tanda del petroleum jelly, la Mega se pega, la 99, y los poemas de radio mil…John Gress y Omega estéreo, todos esos ponches dañándote la música, y para los rockeros el ponche de Radio 10, de hecho esas eran las marcas de agua de esos días para que la gente no tuviera la música completa, sino que había que comprarla limpia en las tiendas de música.
En los 90’s el mercado del cassette disparó sus últimos cuetes con la nueva tecnología antes de su caída por el CD digital
La tecnología digital ya venía fabricando moldes de plástico hechos con programas de computadoras para crear los cassettes y sus carcasas cambiaron a diversos diseños empezando a verse futuristas, compitiendo las marcas entre sí en apariencia. También llegó el plástico resistente a los golpes y a las altas temperaturas prácticas para usar en cassettes resistentes al calor de los autos y sus equipos Alpine, Kenworth, Pioneer y JVC, ahora los cassettes eran un poco más pesados. Para recordar, en los 90’s surgió la leyenda urbana de que los piedreros se volaban cocinando en agua como si fuese un té la cinta magnética que venía dentro de los cassettes.
¿Qué ocurrió con la llegada del CD?
El CD llegó en 1986, pero los equipos para reproducirlos en gran escala salieron más tarde en 1990, porque anteriormente a ello no cualquiera podía comprarse uno. Sólo el discman de SONY fue el pionero del sonido digital en la calle. Con esa lenta difusión del CD, los cassettes aún estaban dando batalla y se creó una mentira en su marketing, la de «los cassettes con calidad CD». Simplemente eran los mismos de siempre en cromo y versión normal que contenían mejor material magnético, en casos como la marca SKC que en los 90’s inundó todo Panamá, por la primicia de la calidad del CD todas las marcas de cassettes decían reproducír sonido digital con altos decibeles. casi +3 db, lo que en la reproducción hacía creer que esto significaba fidelidad digital.
Pero con el mito de la calidad CD había una gran verdad, mucha gente cree que los discos (LP) de vinilo tienen mejor calidad de sonido que un tape, pero no lo es, una cinta reproduce en su ancho más frecuencias del espectro del sonido que la que podía reproducir un LP , porque su desventaja es el límitado espacio en donde vibra la aguja, el zurco, que por impedimento físico sus vibraciones no pueden reproducir todo el rango de agudos que una cinta si puede.
Lo más recientemente creativo que la tecnología está haciendo con los cassettes.
En Kickstarter, una plataforma donde todos aportamos para un proyecto, en 2018 apareció el reproductor OK, el cual es la combinación de un tocador de cinta análogo de cassettes completo que te envía la señal sonora por bluetooth 5.0 a unos audífonos inalámbricos. Con este espíritu sus creadores notaron que había que recuperar esa necesidad perdida del tacto y la conexión física que teníamos con lo que nos rodeaba, y especialmente la música buscando rescatar aquella intimidad y pertenencia que teníamos con ella en los 80’s.
Y una tapa transparente para ver el avance físico de la cinta magnetofónica.
El surgir del cassette actual
Casualmente en Inglaterra está surgiendo un movimiento especial por los cassettes. Tanto que seleccionados artistas han ideado sacar sus canciones nuevas en tape, incluso Madonna. La venta de cassettes alcanzó 75,000 unidades el año pasado y se prevé un mayor consumo, sobre todo debido al espíritu que envuelve el formato para las nuevas generaciones, se trata de los géneros y estilos de música que se están apreciando del pasado, habiendo no mejor forma poética de consumirlos que desde la fuente original.
Aunque sospecho que los Guardianes de la Galaxia tuvo mucho que ver…hasta aquí el tema…que hubo mucho que recordar.