por 
Contraste de superhéroes
Hace meses que quería poner mi opinión desde que vi el primer trailer, porque no me gusta la arena de la playa, pero sí el mar, su paisaje y su ingenioso ecosistema de animales que permutan bajo los linderos de ese manto azul…pero sobre esta película no puedo evitar no dejar de pensar en las princesas de Disney y en lo endeble y poco creíble de la civilización atlante y su personaje. Es como ver a Ariel en testosterona. Hay algo inquietante para mi en Aquaman, en cuanto a créerme un reino entre las profundidades líquidas de aquella pesada oscuridad azul verdosa. Tampoco me degluyo la coherencia de una tecnología bélica de alta efectividad funcionando correctamente bajo el mar de nuestro planeta, que funciona con oxígeno, carbón y combustión.
El personaje
El Aquaman que todos conocemos es el amistoso muñequito que se transportaba sobre delfines en la cómica televisiva de los 70’s. En realidad, nadie respetaba a ese superhéroe, al cual gracias a los cómics de papel se le adhirió una personalidad y carácter más acorde con su responsabilidad. El nuestro, se la pasaba en la playa, parqueando con los humanos cuando se le necesitaba, era divertido y místico, pero no tenía historia ni fondo, a pesar de vivir en el fondo del mar.
Ariel en escena, sin autorización de Disney
Jason Momoa le imprime un aire de orgullo vacío de jovencito de high school a este personaje de Aquaman más petulante que una caricatura de James Bond, y lo que funciona en él es la historia desde su infancia, la clásica versión del mesías que se adapta en cada superhéroe conocido.
Los animales
Está es una de las vainas que me rompe el coco. De existir Aquaman y ser el rey del mar y sus criaturas, como podría él responder moralmente a la indiscriminada cacería marina de ballenas, atunes, sardinas, pulpos, tortugas, tiburones, mejillones, estrellitas de mar asfixiadas, indefensos planctons, etc, etc… sujetos a los mismos pecados humanos contra la fauna. Recuerden a Tarzán, que sí hace su papel político como defensor de su habitat. Estos animales marinos vivirían como en una dictadura de Maduro sin nadie que los defienda de los humanos depredadores. O sea, que Aquaman sería un lambón, entregado a la humanidad al no defender su ecosistema. Me recuerda otra actitud diferente, la de Black Panther manteniendo la tradición de Wakanda una nación millenial que se ocultó de la humanidad para autoprotegerse.
A esto es lo que me refiero, tanta tecnología y mística y usando tiburones como si fuesen caballos sin control de la ira. Y yo cogiendo rabia por esto como un Grinch.
La percepción de la realidad
Resumí demasiado en el primer párrafo, pero lo desglosaré por acá, de como se me hace demasiado antipoda al realismo de nuestro mundo físico esta película de Aquaman. De como la existencia de un reino subacuático está sostenido por las leyendas de Atlantis, que pertenecen a las fábulas pseudo-científicas del presente. Un mundo tal como lo representa la cinta no existiese, sobre todo, porque como régimen político su base se ha quedado en un medievo fantasioso incoherente con nuestra idea de estructura política moderna, es muy irreal y sobre todo sus componentes de un reinado de ensueño. Su misticismo choca violentamente contra la experiencia de realidad de nuestra audiencia actual, no son los 80’s, no hay imaginación inocente que sostenga un mundo atlante de equidad tan surrealista. Además, con el mar vuelto ñecks como lo tenemos hoy ¿Dónde cabe otra civilización más? No hay oceano pa´tanta gente.
Sé que es fantasía, pero Pacific Rim logra transportarme con más facilidad. El verdadero obstáculo, según mi criterio para películas de superhéroes con mundos que cohecionan con el nuestro es la conciencia real de nuestros verdaderos límites físicos. Tocamos las puertas del espacio exterior y sabemos que nada nos responde, tanto en el SETI, como en las fosas de las marianas, por lo tanto la película Cocoon de 1985 lleva el asunto de la existencia de vida bajo el mar con mayor credibilidad, sigo de Grinch, porque no me gusta el agua.
Por otra parte Thor, era más creíble, porque Asgard no estaba en nuestro sistema solar, es mitología nórdica y Wakanda existía, porque la tecnología les permitía no tener contacto con el resto del planeta, sólo que se quedaron con las lanzas, así como los Atlantes con los caballitos de mar y las sardinas.
Los superpoderes
Con ver los trailers uno se pregunta cómo funcionan esos bastones y tridentes de poder o rayos láser atravezando el oxígeno y causando explosiones. ¿Cómo son las explosiones bajo el mar? El agua es un medio que conduce la electricidad de manera formidablemente eficiente, pregúntenle a las anguilas. El sonido también es altamente mortal bajo el agua, por lo que esta muy bien usar cascos ahí debajo. La cicatrización necesita de oxígeno para secar. ¡Qué va! En una batalla bajo el mar estás más propenso a morir que a sobrevivir. Sales herido y ya tienes a los tiburones, las sardinas y los cangrejos justo ahí para picotearte y hacerte pedacitos.
Burbujitas bajo el mar…¿De dónde saldrán?
Sobre asuntos de civilizaciones más realistas tomemos a Otoh Gunga, el mundo de Jar Jar Binks en Star Wars como un ejemplo que sí se me hizo creíble, ya que sus habitantes vivían en un lago inmenso, pero en un medio oxigenado bajo burbujas como grandes estadios interconectados, no en el mismo líquido, tan funcionales eran los gungans como aliados de Naboo que pelearon sobre un terreno en tierra firme con sus armas, las cuales actuaban y se comportaban correctamente en un ambiente seco.
Otoh Gungan, o sea el guetto marino de Jar Jar
El obstáculo del agua
Y sigo preguntándome más tonteras, de donde procede tanta luz para que vean debajo del agua y por que aquel agua es tan exageradamente transparente y cristalina.
El medio acuático necesita enormemente de la aerodinámica para ser eficiente y una guerra del oeste bajo el mar como que se ve torpe para nuestra mente, la cual tiene que autosugestionarse para que la física actúe aquí, lo que para nosotros es más fácil de creer con Star Wars, donde el vacío espacial brinda más alternativas de acción que el grueso y pesado mar.
El submarino es veloz mientras no se mueva mucho y Star Wars va a la velocidad de la luz
Sólo recordemos como son las batallas navales de la segunda guerra mundial, llenas de suspenso por su lentitud y sus lapsos de tensión con el hundimiento de buques y submarinos a la velocidad del caracol. La guerra bajo el mar es lenta, a excepción de los torpedos y los submarinos en movimiento, pero violenta y trepidante sobre su superficie con los aviones caza atacando acorazados y cuando veo estas batallas entre atlantes, sólo pienso que se están mojando los calzones bajo esas armaduras apretándoles la panza a esos caballotes de mar.
Mi verdadero Aquaman
Hasta aquí llegamos con la fantasía de Aquaman, que como personaje fundador de la Liga de la Justicia compartía risas en el Salón de la Justicia junto a Batman, Wonder Woman (me aburre escribir mujer maravilla porque gasto letras, ¡Ups! parece que ya estoy usando letras de más) y el resto de los superamigos. El personaje de Aquaman se me parecía un fulo playero a la moda de los Beach boys, ya que siempre cuidaba su corte de pelo con gel de algas y usaba su poder wi-fi para dominar a los animales marinos en contra de su voluntad por medio de ondas telepáticas y a quien Greenpeace estaría hoy día demandando por maltrato animal.
Mientras tanto a esperar diciembre para dejarnos seducir por la fantasía y acción de Aquaman, un personaje ligero y bonachón rescatado por el universo DC para ver si da más bola en la pantalla grande que las anteriores entregas de Superman y Batman.
buy office 2019 pro
